Basta que hagamos un curso de fotografía para que haya un apartado en el que nos muestren cuales son las 'reglas' de la fotografía, sin embargo, este es un concepto erróneo.
Una regla es algo que se debe hacer de un modo concreto y no de otro. La primera 'regla' que se suele enseñar es la de los tercios, es decir, ordenar la imagen en tercios. La segunda supuesta regla es el descentrado del sujeto principal. Otra regla puede ser que nada sobrexponga, etc.
En fotografía no podemos hablar de reglas, si acaso se me ocurre alguna sería:
1) Si quieres hacer una foto deberás pulsar el botón
2) Si quieres guardarla deberás tener un soporte, carrete o tarjeta.
Cada fotografía tiene su momento y su composición. En unas requerirá descentrado, en otras centrado. En unas requerirá tercios, en otras, quintos o incluso que esté justo en la mitad. En algunas requerirá una iluminación perfecta, en otras subexposición o sobrexposición. En unas habrá foco, en otras, desenfoque... y así se podían tirar por tierra todas y cada una de las reglas.
Un Ejemplo:
En esta foto hay 3 sujetos destacables. El primero y más próximo, la piedra plana de la parte inferior izquierda. Es lo primero que nos llama la atención.
El segundo sujeto es el sol y el tercero la formación rocosa del fondo a la izquierda.
La composición está hecha de tal manera que la formación rocosa y la piedra quedan al margen izquierdo y el sol al derecho, sin embargo la 'regla' de los tercios queda rota con el horizonte, que se presenta en la mitad de la foto y no crea ningún problema a la vista. De igual manera, el sol está claramente sobrexpuesto, y eso no significa que esté mal, es más, es fiel a la realidad de lo que se veía en aquél mismo instante.
El primer plano de la piedra no está nítidamente enfocado, pero es que tampoco es necesario, así se evita diafragmar, es decir, cerrar en exceso el diafragma con la correspondiente pérdida de calidad de la foto. La foto está hecha a f/8, 5sg. e ISO 100, y el enfoque manual está ajustado un poco por debajo de la mitad de la foto.
Un último dato. Una de las cosas deseables fotograficamente hablando es que los distintos sujetos queden separados entre sí y no creen confusión. Si os fijáis, en el primer plano cada piedra está separada, pero a medida que nos acercamos a la mitad vemos que ya no es posible la separación. Un punto más elevado nos habría separado un poco más las piedras del fondo, pero la composición cambiaría drásticamente. ¿Está por eso mal la foto? Creo que no.
Otro ejemplo:
En esta flor de Silene sp. alguien podría decir: ¿Para qué quieres tanto verde? Muchas personas pondrían solo la flor y punto.
La flor en cuestión no está ubicada así al azar. Está mirando hacia arriba, hacia el sol, y de esta forma dejo una franja de algo más de la mitad de la foto en la que se aprecia hacia donde mira la flor y el color del fondo sobre el que vive la flor. Esto no es una regla, es algo que en este caso funciona bien y genera un interés, que de haberla mostrado sola, no hubiera tenido.
Otro ejemplo:
En este caso, lo anterior ha funcionado al revés. La flor está mirando al sol, pero la composición final se ha balanceado a favor de mostrar el tallo en desenfoque y no el lugar al que está mirando la flor.
Como digo, cada foto plantea unas condiciones y atraerá más de una forma que de otra.
CONCLUSION
Debemos conocer las distintas posibilidades que da la composición y dar a cada momento lo más adecuado. Este es un trabajo arduo que nos llevará muchas horas de ver cuadros y fotos y muchas horas de hacer tomas y más tomas.